Conocemos un gran número de consejos y buenas prácticas para evitar caer en estafas y fraudes, pero, ¿conocemos las buenas prácticas a seguir una vez que hemos realizado el pago? Veámoslo en el siguiente artículo.
Comprar a través de Internet es algo que ya está presente en nuestro día a día y a la que tanto los usuarios como los comercios hemos sabido adaptarnos rápidamente. Cada vez son más los servicios y tiendas con las que interactuamos a través de la Red, y son muchos los consejos y buenas prácticas que seguimos para escoger solo aquellas webs que nos transmiten confianza.
Lo mismo hacemos con los vendedores y productos, donde debemos seguir paso a paso los consejos y pautas que vienen recogidos en nuestra guía sobre compras seguras y la hoja de ruta para comprobar si una tienda online es segura o fraudulenta:
- Utilizar solo tiendas online o plataformas de compra venta fiables.
- No dejarnos llevar por chollos demasiado buenos para ser ciertos.
- Utilizar métodos de pago seguros.
- Utilizar contraseñas robustas para proteger nuestras cuentas.
- No utilizar dispositivos públicos o redes no seguras para realizar nuestras compras.
- Revisar toda la información referente al envío y devolución de los productos.
Sin embargo, muchos usuarios dejan de lado las buenas prácticas a seguir una vez que hemos realizado la compra. En el tiempo
desde que realizamos el pago hasta que recibimos nuestro producto aún debemos realizar algunas comprobaciones para asegurarnos de no ser víctimas de algún tipo de fraude.
Por ello, hemos elaborado una lista en forma de
checklist para que cotejemos con nuestra experiencia al comprar online y tengamos la tranquilidad de que lo hemos hecho de forma segura:
Comprueba que... (si/no)
- Has eliminado los datos de pago. Es más seguro si eliminas la información del método de pago, ya que el servicio donde la tengas almacenada podría sufrir algún tipo de ataque que expusiese esta información.
- Te han enviado un enlace o número de seguimiento. Así podrás seguir el envío y comprobar su estado en todo momento.
- Dispones de una copia del recibo o factura. Es importante a la hora de reclamar, devolver un producto o ejercer la garantía.
- Se han realizado los cargos en tu cuenta bancaria. También te permitirá identificar cargos sospechosos que se relacionen con algún fraude.
- Has cerrado la sesión de tu cuenta. Por seguridad, es mejor desconectarte de tu cuenta una vez finalizada la transacción, de modo que no se guarde la sesión.
- Has borrado los datos de navegación del navegador. Puedes borrar los datos de navegación, como búsquedas, historial de páginas visitadas y cookies para evitar que quede un rastro de tu compra.
- El producto está en perfectas condiciones. Una vez recibido el producto, y si es posible, revísalo junto al repartidor para asegurarte de que no tiene desperfectos y que es lo que has pedido.
Además, recuerda que como consumidores, contamos con 14 días para devolver cualquier producto sin necesidad de justificación alguna. Si el producto que recibimos está dañado o no funciona correctamente, tendremos derecho a solicitar la reparación del mismo o a cambiarlo por otro producto idéntico sin coste adicional.
Esta información debe venir claramente detallada en la web donde vayamos a realizar la compra. Igualmente, cualquier producto que se adquiera a través de una tienda online también incluye una garantía de dos años, y deberá quedar claramente reflejado en la web.
¿Qué podemos hacer si hemos sido víctimas de un fraude?
Si nos encontramos con la desagradable situación de que alguno de los pasos anteriores no ha salido como debería, o tenemos la sospecha de haber sido víctimas de un fraude, lo primero que deberemos hacer es mantener la calma y recopilar toda la información de la que dispongamos, como correos intercambiados, facturas, etc.
Finalmente, es recomendable
denunciar el fraude del que hayamos sido víctima ante las
Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE). En definitiva, los pasos que habría que dar son:
- Guardar toda la información relacionada con el fraude.
- Ponernos en contacto con la tienda online o plataforma de compraventa.
- Formalizar la denuncia ante las FCSE.
En el caso de que se trate de un fraude relacionado con el pago, es fundamental que contactemos con
nuestro banco para que cancele cualquier pago que se realice desde nuestra cuenta y que no haya sido autorizado o sea sospechoso. Si, por ejemplo, nuestro producto no ha llegado a tiempo y tenemos la sospecha de que hemos sido víctimas de una estafa, nuestro banco puede cancelar dicho pago para no perder nuestro dinero o tratar de recuperarlo.
En ocasiones, nuestro banco podrá interceder y conseguir recuperar nuestro dinero. Sin embargo, no siempre tendremos tanta suerte, y es posible que no lleguemos a tiempo. También puede que hayamos realizado una transferencia a un banco extranjero que ponga más problemas a nuestra entidad bancaria para contactar y recuperar el dinero.